Paolo2018年12月

Un lugar maravilloso en la montaña. Tras haber reservado previamente la casa de Nilda, fuimos a Salta en busca de un lugar para alojarnos y desde ahí descubrir la región (Salta-Jujuy). Llegamos desde muy lejos y aunque si bien no teníamos el contacto directo de Nilda, nos apañamos para localizarla y ella al momento respondió con mucha eficacia. Nos recibió Gabriela, con un trato encantador, mucha simpatia y hospitalidad, nos enseñó la casa: UN CASERON super grande con mucho confort, y todo lo necesario para pasar unos días de descanso. De entrada te impacta la vista a Salta y Vaqueros, desde adentro atreves de unas vidrieras, y desde el patio y piscina donde además se respira mucha naturaleza. La casa es MUY acogedora, cómoda y sobre todo tiene algo muy importante: admite mascotas, cosa fundamental para quienes tenemos hijos de cuatro patas. Terminamos quedándonos más de lo previsto y esperamos volver ya que solo aprovechamos para pasar la noche y lo vale para pasar el día entero solo en la piscina, tirado en el césped o haciendo un rico asado con amigos.