Alejandro2022年1月

Fuimos en familia (4) una semana en diciembre con mucho calor. La casa es enorme y está en el medio de un entorno natural de monte protegido y orilla de río con una poza enorme justo bajando la casa. Dos terrazas permiten disfrutar del paisaje y en una de ellas se ve un desfile interminable de colibríes a casi cualquier hora del día. La vista al monte de día y al cielo estrellado de noche es inmejorable. A 30 minutos de la Reserva Natural de la Defensa Ascochinga, un lugar increíble para disfrutar del río. A tener en cuenta para manejar horarios: hay mucha gente en la poza fines de semana a partir de media mañana y en las tardes. Temprano a la mañana nunca hay gente y poca a última hora. La pasamos genial!!

Daniel2021年8月

Hemos pasado unos días maravillosos en casa de Marcelo, un excelente anfitrión, nos acompañó desde el Aeropuerto hasta la casa y nos explicó todo lo necesario. La casa es realmente maravillosa, de las mejores en las que nos hemos hospedado. Sin dudas volveremos.

Gonzalo2021年4月

Muy buen lugar! La cabaña es hermosa y espaciosa y el lugar es ideal si buscas desconectarte y relajar. Tiene bajada al rio en una zona que es apta para bañarse y la privacidad es espectacular. Cosas a tener en cuenta es que no tuvimos señal de celular y recomiendo llevar colchas propias para evitar problemas con ácaros y polvo.

Laura2021年3月

La vista es increíble, el río está a dos minutos, y la casa tiene todo lo que se puede llegar a necesitar. es un lugar encantador para desconectarse y descansar!

Vanina2021年1月

La casa de Marcelo está sumergida en las sierras cordobesas, rodeada de una vegetación exuberante. Tan pronto de llega a la casa se escucha el ruido del río en las cascadas naturales que forman las piedras. Precioso lugar para adentrarse y explorar, o simplemente sentarse en la galería a disfrutar la brisa, el canto de las aves y la majestuosidad del paisaje. La casa se compone de 4 niveles: en el superior queda la cochera, luego se baja al quincho y de ahí se puede acceder a la cocina que cuenta con desayunador, y luego al living comedor que hace las veces de habitación. Allí están la.mesa comedor a un lado, las camas y una galería amplia con dos hamacas Paraguayas. No hace falta aire acondicionado porque corren brisas constantemente, sobre todo a la noche que refresca bastante. El baño es cómodo y la cocina cuenta con todo lo necesario para poder cocinar. El pueblo más cercano está a unos 5km. Cabe aclarar que el camino es un camino de sierra en algunas partes accidentado: no hay asfalto. Aún así se puede entrar y salir perfectamente con lluvia. El río es lo más lindo del lugar. No es privado, por lo que los fines de semana se congregan jóvenes o familias a disfrutar esa maravilla de lugar. Si no ha llovido, el agua es cristalina y pura. Con lluvia se torna marrón, por los mismos sedimentos que arrastra y si la corriente no es muy fuerte o a crecido mucho se puede disfrutar igual. Tiene partes hondas y partes playas, con el fondo principalmente de rocas o gravilla. Para llegar al río se desciende por un sendero rodeado de acacias (hay que tener cuidado con las espinas, nada grave) y muchos escalones. No creo que sea un lugar apropiado para personas con problemas en las rodillas o de movilidad, por lo escarpado que se torna el terreno en algunos lugares (sobre todo para entrar al río, hay que hacerlo a través de las rocas, pero nada quita lo espectacular de la experiencia). En mi caso tengo Personal como compañía de celular y casi no tuvimos señal. Tampoco hay wi-fi así que solo queda desconectarse y relajarse. Mi recomendación para los que llegan a este lugar, es realizar una provista para toda una semana o lo que dure la estadía y así no tener que moverse de este lugar. Porque realmente no dan ganas de salir. Como anfitrion Marcelo estuvo pendiente en todo momento y nos recomendó actividades. Lo único que le sugeriría es cambiar los colchones por unos de alta densidad, al menos en dos camas. Por lo demás es un lugar único, realmente un pedacito de cielo, al que volveremos sin duda.